En ninguna de las obras de la escritora Laura Restrepo se verán los temas de la depresión, decepción o el bajón de ánimo porque su estilo es tener personajes que se superan y siempre mirará hacia adelante.
Al participar en la mesa llamada “Mil Jóvenes con…” dentro de las actividades de la Feria Internacional del libro (FIL) recordó su paso de activista en su natal Colombia y que le implicó una serie de riesgos para su vida por lo que tuvo que refugiarse en México.
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“He vivido una vida difícil con situaciones muy complicadas porque además las busco, dicen que uno se aficiona a la adrenalina yo creo que tengo esa adicción, pero soy una persona muy feliz, no me preguntes por qué, amo a quienes me rodean, me siento amada, me gusta que en las novelas eso se sienta”, mencionó ante la mirada atenta de los jóvenes.
Ante esta situación de lucha y superación de riesgos dijo que a “mi no me convence la decepción, no me convence la depresión, no me convence el bajonazo de ánimo y entiendo que hay escritores que tienen ahí, digamos, su punto fuerte y lo tratan bien, es no lo encuentras en mi novela, en mi novela es gente fuerte que anda en el pedaleo, va para adelante, sufre y pasa por cosas atroces, sale adelante”.
Aunque sus personajes no siempre salen adelante, siempre tienen una fascinación por la vida y por la gente, “un enorme respeto y admiración con el género humano” y como latinoamericana es la importancia de la dignidad y eso lo tienen sus personajes hasta en las circunstancias más difíciles y esa característica es una de las grande cualidades de México y Colombia, más a llá de no tener riquezas, desarrollo o seguridad de otros países.
“Es difícil en nuestro medio encontrar a alguien que se arrastre porque la vida lo revolcó y lo aniquiló, es difícil por lo general la gente nuestra mantiene un espíritu de dignidad que al final viene de la confianza, de la solidaridad, entre otras cualidades.
Pero también en su obra están ausentes los temas relacionados al medio ambiente, aspecto que su hijo Pedro le reclama constantemente debido a que en Colombia hay una serie de problemas con la enorme franja del Amazonas que cruza su país.
“Mis libros no lo tocan, mi hijo me lo reclama mucho, me dice, tú que has sido activista toda la vida cómo es posible que o tengas un libro sobre el Amazonas, y hoy en día la supervivencia del planeta depende en muy buena medida que conservemos los latinoamericanos nuestras selvas, los europeos básicamente ya quemaron sus bosques, nosotros todavía los tenemos”, aseguró.
Laura Restrepo indicó que en el 2021 no pudo asistir a la FIL debido por los problemas de Covid-19 en su familia, pero este año llegó para escuchar a los jóvenes y “quiero decirles que los premios literarios son muy buenos, sobre todo porque sueltan ahí plática que ayuda a sobrevivir, eso está muy bien, pero el verdadero premio para un escritor es saber que si su generación lo leyó, la siguiente también y aquí en la feria hemos presenciado a un padre, una madre que han leído mis libros y que llegan con un hijo o una hija para decirles quiero presentarte a la escritora que he leído”.
Explicó que todo escritor que no se entere del mundo los videojuegos y de la novela gráfica comienza a quedarse rezagado y las series de televisión porque son recursos narrativos a los que no les pueden cerrar los ojos si es que no se quieren quedar obsoletos y en el pasado.