Plasmada como una de las artistas jaliscienses que marcó una época en el arte de México, en el marco del Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG37) se proyectó un documental sobre la pintora María Izquierdo.
Con la presencia del director, así como de la familia de la pintora, el documental es una historia del arte y la mujer en el siglo XX, a través de narrar la vida y obra de una artista considerada como ecléctica, liberal y feminista, quien pudo desenvolverse dentro de una sociedad machista y conservadora.
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Al haber representado un ejemplo de lucha, en la obra se puede apreciar no solo la evolución de Izquierdo como pintora, sino cómo incluso fue marginada del movimiento muralista mexicano.
A decir de Gabriel Santander, director del documental, no fue fácil llevar a cabo esto por la pandemia por Covid-19, así como la dificultad para acceder a recursos en la industria del cine, no obstante a esto, aseguró que su obra no solo está revestida de una gran belleza, sino que también se podrá apreciar la angustia metafísica, el dolor y la alegría.
Como este fue el resultado de UDGTV 44 y Canal 22, quienes unieron esfuerzos para coproducir el trabajo, durante la transmisión del documental, Gabriel Torres Espinoza, director del Sistema Universitario de Radio, Televisión y Cinematografía de la Universidad de Guadalajara (UdeG), expresó que María Izquierdo buscó revertir, con su brillante creatividad pictórica, la desfavorable condición de las mujeres en el México posrevolucionario, con obras emblemáticas como 'Retrato del edén', 'Niñas durmiendo', por mencionar algunas.
Refirió además que fue una mujer que rompió con paradigmas, resaltando con retratos melancólicos que tocan temas como la naturaleza muerta, paisajes y esbozos del surrealismo también.
“Su arte representa la sutil simbiosis de drama y ternura, soledad y jolgorio, violencia y juego, primitivismo y sofisticación, pinturas ensimismadas, palpitantes de vida y rebosantes de pasión”, añadió.
Oriunda de San Juan de los Lagos, Jalisco, María Izquierdo, a 120 años de su nacimiento, es recordada como la primer artista plástica en exponer sus obras fuera del país. Sus restos, desde el 2012, descansan en la Rotonda de las Personas Ilustres, en el Panteón de Dolores en Ciudad de México.