Sin liderazgo alguno, sin honor por su conducta tan indigna y servil, derivado de su empeño para complacer a su mentor en todos los actos oficiales y públicos, misma actitud que también es propia de los veinticuatro estados que gobierna MORENA, pues sólo se limitan a escuchar y a obedecer, a quien les preparó durante toda la administración, a la par de los operadores del Instituto Nacional Electoral y el Tribunal Federal Electoral, ante un resultado por demás increíble, derivado del número de votos que supuestamente fueron otorgados a su favor, resultado legitimado por los integrantes de dicho tribual.
Aunado a lo anterior, las más de diecisiete legislaturas de los estados que, algunas se desbordaron en la urgencia de servir al hoy redentor nacional, ese mismo que los hizo gobernantes en cada uno de sus estados y también hay que sumar a los integrantes de las cámaras de senadores y de diputados, algunos de ellos sujetos criminales, esa corrupta, servil y traicionera mayoría calificada, obtenida mediante la extorsión innegable, pero por algunos bien justificada, pues a decir de algunos, no hay político que no tenga cuentas pendientes con la justicia por todo tipo de delitos, inclusive con órdenes de aprehensión pendientes de ejecutar, las cuales fueron canceladas a cambio de su voto a favor de la más ilegal reforma constitución carente de toda validez, aunado a que solamente hacen lo propio por obedecer a su capataz y protector criminal.
Ante tal escenario, es de entenderse, el por qué, una mayoría le deben lealtad y sumisión a ese sujeto apodado “peje”, a nadie más, ni siquiera al pueblo, razón por la cual, es posible afirmar que, la presidenta impuesta, sea ajena a todo tipo de liderazgo y lealtad de esos miserables testaferros, pues no es de extrañarnos que el día en que, la presidenta no obedezca a López Obrador, sus sirvientes pueden instaurarle un procedimiento por traicionera y si alguien no está de acuerdo en lo que expreso, pues que demuestre que no es cierto lo que aquí expreso.
No obstante todo lo anterior, lo más grave es, la tibieza de la sociedad desmemoriada, respecto a que, el presidente actual, para lograr llegar a la presidencia, cometió todo tipo de conductas violentas, desde tomar las calles más importantes de la ciudad de México, hasta prenderles fuego a los pozos petroleros allá en Tabasco, por lo que para contener la caída al vacío en que se encuentra el país, es urgente emprender acciones de esa proporción para salir de infame situación sin dejar de un lado que, nuestra patria ¡Que viva México!