/ lunes 25 de noviembre de 2024

Presupuesto 2025 para Jalisco

En uno de los últimos arrebatos, el titular del Ejecutivo Estatal decide imponer a su sucesor una iniciativa que busca salir del llamado “pacto fiscal”, bajo la cantaleta gastada de no recibir la misma cantidad que la que aporta. A este respecto, la presidenta Claudia Sheinbaum le ha recordado las pautas del segundo piso de la cuarta transformación y la prosperidad compartida que busca que se apoyen a todos los estados que conforman la federación en condiciones de equidad y justicia social.

El mencionado “pacto fiscal” deriva de la Ley de Coordinación Fiscal que busca establecer un acuerdo entre la federación y las 32 entidades para que exista una distribución de los recursos obtenidos por la recaudación de algunos impuestos, entre los que destacan el IVA y el ISR. Bajo supuestos de competitividad, el gobernador saliente pide que se le premie el coto de poder generado en lugar de la distribución de la riqueza de forma equitativa.

Sin embargo, no es solamente el tema de la equidad entre los estados que conforman la federación, es también un tema de aprovechamiento y comportamiento eficiente en beneficio público más que a intereses privados, que es lo que ha prevalecido en Jalisco, afincado como coto de poder en manos de un grupo político.

Para 2025, Jalisco recibirá un presupuesto de 139 mmdp de forma directa, que representa un aumento de más de 6 mmdp con respecto al año 2024. Es decir, el presupuesto para Jalisco se incrementa un 4.5 %. Sin dejar de señalar los programas sociales, obras, pensiones y becas por más de 10 mmdp. Prácticamente, como señaló el Secretario de Hacienda, el 86 % del recurso que llega a nuestro estado proviene directamente de la federación, en un signo de alta dependencia. Además, los diversos convenios de descentralización que alcanzan los 150 mmdp.

A lo que se le invita al próximo gobierno es que asuma la responsabilidad de una administración eficiente para equilibrar la balanza estatal y que sus niveles de productividad se reflejen en el nivel de recaudación proporcional sin lastimar al pueblo jalisciense. Se debe abandonar la politiquería y, en su lugar, buscar una amplia reforma de austeridad en la administración pública, vincular a los diversos sectores sociales y productivos y poner límites a las camarillas que se han apropiado del erario.

El secreto no es ni deuda ni impuestos, sino austeridad, transparencia, manejo eficiente del recurso público, políticas saludables, buenas prácticas, coordinación con la federación y con los municipios. No politiquería de élite, no economía “de cuates”. Acciones de cara y a favor del pueblo no de los amigos. Es momento de plantear iniciar el nuevo gobierno estatal “bien y de buenas”, con mucho “ánimo”.

Karla Díaz

Regidora de Zapopan

X: _KarlaDiaz_

FB: Karla Díaz

Instagram: _karladiaz_1

En uno de los últimos arrebatos, el titular del Ejecutivo Estatal decide imponer a su sucesor una iniciativa que busca salir del llamado “pacto fiscal”, bajo la cantaleta gastada de no recibir la misma cantidad que la que aporta. A este respecto, la presidenta Claudia Sheinbaum le ha recordado las pautas del segundo piso de la cuarta transformación y la prosperidad compartida que busca que se apoyen a todos los estados que conforman la federación en condiciones de equidad y justicia social.

El mencionado “pacto fiscal” deriva de la Ley de Coordinación Fiscal que busca establecer un acuerdo entre la federación y las 32 entidades para que exista una distribución de los recursos obtenidos por la recaudación de algunos impuestos, entre los que destacan el IVA y el ISR. Bajo supuestos de competitividad, el gobernador saliente pide que se le premie el coto de poder generado en lugar de la distribución de la riqueza de forma equitativa.

Sin embargo, no es solamente el tema de la equidad entre los estados que conforman la federación, es también un tema de aprovechamiento y comportamiento eficiente en beneficio público más que a intereses privados, que es lo que ha prevalecido en Jalisco, afincado como coto de poder en manos de un grupo político.

Para 2025, Jalisco recibirá un presupuesto de 139 mmdp de forma directa, que representa un aumento de más de 6 mmdp con respecto al año 2024. Es decir, el presupuesto para Jalisco se incrementa un 4.5 %. Sin dejar de señalar los programas sociales, obras, pensiones y becas por más de 10 mmdp. Prácticamente, como señaló el Secretario de Hacienda, el 86 % del recurso que llega a nuestro estado proviene directamente de la federación, en un signo de alta dependencia. Además, los diversos convenios de descentralización que alcanzan los 150 mmdp.

A lo que se le invita al próximo gobierno es que asuma la responsabilidad de una administración eficiente para equilibrar la balanza estatal y que sus niveles de productividad se reflejen en el nivel de recaudación proporcional sin lastimar al pueblo jalisciense. Se debe abandonar la politiquería y, en su lugar, buscar una amplia reforma de austeridad en la administración pública, vincular a los diversos sectores sociales y productivos y poner límites a las camarillas que se han apropiado del erario.

El secreto no es ni deuda ni impuestos, sino austeridad, transparencia, manejo eficiente del recurso público, políticas saludables, buenas prácticas, coordinación con la federación y con los municipios. No politiquería de élite, no economía “de cuates”. Acciones de cara y a favor del pueblo no de los amigos. Es momento de plantear iniciar el nuevo gobierno estatal “bien y de buenas”, con mucho “ánimo”.

Karla Díaz

Regidora de Zapopan

X: _KarlaDiaz_

FB: Karla Díaz

Instagram: _karladiaz_1