La economía en el país, a pesar de que muchos aseguran que va bien, la realidad es que no vamos bien en el desarrollo económico del país, se perdió mucho durante la pandemia y no tuvimos un gobierno eficiente que tomara buenas decisiones para que no cerraran 1 millón de empresas.
Además, por algunas decisiones del Gobierno Federal hoy México ha perdido la confianza de los inversionistas, lo preocupante es que estamos en medio de un contexto ideal para que México y el Gobierno Federal tuvieran una estrategia de atracción a la inversión, hoy sabemos que lo están haciendo algunos estados como Jalisco y Nuevo León, pero no es suficiente.
Pero, ¿por qué digo que hemos perdido la confianza como país? Porque según el Índice de Riesgo País, calculado por JP Morgan Chase y conocido también como el Índice de Bonos de Mercados Emergentes, que se basa en el comportamiento de la deuda externa emitida por cada país, México ha bajado 6 lugares en los últimos 8 años. En 2015 México se ubicaba en el lugar número 5 de 17 economías de América Latina y en 2023 tenemos el lamentable lugar número 11 de las mismas 17 economías.
¿Qué sucedió? Países como Brasil, Colombia, República Dominicana, Paraguay y Costa Rica hicieron mejor las cosas y hoy son considerados como países más seguros para invertir, lo que no solamente nos afecta, sino que nos obliga a hacer mejor las cosas, a tomar mejores decisiones, pero sobre todo a ocuparnos al respecto.
En el caso mexicano no es solamente la deuda externa, algo que también ha tenido un grave impacto es la salida de capitales en los últimos meses, pero eso se da por acciones del Gobierno como lo ocurrido en mayo con los decretos presidenciales por los cuales se tomó posesión de las vías férreas de Ferrosur, perteneciente a Grupo México, con lo que se genera incertidumbre y obviamente un riesgo para los inversionistas que deciden mejor, retirar su capital y no arriesgar su dinero.
Lo hemos dicho fuerte y claro, el Gobierno de México es una fábrica de pobreza, no tuvieron la capacidad de recuperar la economía rápidamente, de apoyar al sector empresarial, de generar confianza y certeza a la inversión en momentos complicados y menos ahora en un contexto en el que el Nearshoring puede ser la diferencia entre desarrollar la economía y crecer la economía, porque el crecimiento actual corresponde a lo que se perdió durante 2019 y 2020.
Ejemplos claros tenemos con PEMEX y la CFE, empresas estatales que pierden dinero todos los días, porque no saben manejar una empresa, mucho menos van a entender lo que requiere el sector empresarial, ha sido muy fácil destinar recursos a la deuda de PEMEX y a las ineficiencias de CFE, pero eso pasa cuando vale más la lealtad que la experiencia y los perfiles, y si no me creen, vean las respuestas del Director de PEMEX, Octavio Romero, sobre el derrame de crudo en el Golfo de México hace una semana o también pueden ver sus respuestas a mis cuestionamientos en sus comparecencias en la Cámara de Diputados.
Hoy la confianza y la certeza a la inversión debería ser una prioridad para el Gobierno Federal, pero su mentalidad esta puesta en el 2024 y las elecciones, no entienden que el país es primero, antes que el Presidente, antes que su partido y antes que sus corcholatas.
*Diputado Federal MC.