Pocas cosas podrían honrar tanto al gobierno del que soy parte como anunciar que hemos logrado una cobertura del cien por ciento en la atención integral de niñas, niños y adolescentes que padecen cáncer. Son 172 familias sin afiliación médica las que reciben apoyo en efectivo para financiación de la renta de su hogar, enseres domésticos, asesoría nutricional y traslados y hospedajes para las revisiones médicas periódicas en los hospitales de la capital del estado. Jalisco se convirtió así en la única entidad del país que cubre la atención de esta dolorosa problemática en su totalidad, gracias a la colaboración entre el gobierno y la sociedad civil.
Hemos construido también una extensa red de transporte en las doce regiones de Jalisco para lograr casi 400 traslados de los pacientes desde la puerta de su hogar hasta el hospital, ida y vuelta. Como soporte al plan alimenticio diseñado por un profesional de la salud que se le otorga a cada familia, entregamos más de 500 dotaciones de alimentos variados, nutritivos y completos a casi 200 familias.
La pandemia por coronavirus y otro tipo de infecciones emergentes como la viruela símica han relegado a un segundo plano en el debate público a una enfermedad tan terrible como el cáncer. En el Gobierno de Jalisco decidimos poner todas las instituciones y los recursos del Estado a disposición de las personas más vulnerables de nuestra entidad, que son las infancias y las juventudes que padecen de esta dolencia, especialmente quienes pertenecen a familias que cargan con distintos tipos de pobreza y se encuentran en los espacios más remotos del estado.
El enfoque de este gobierno es garantizar derechos a través de políticas públicas integrales, racionales y multidimensionales. Por ejemplo, la entrega de canastas de alimentos a familias con niñas y niños enfermos de cáncer atiende tanto los derechos a la salud como a la alimentación, y busca atacar tanto la problemática del cáncer como de la pobreza alimentaria, otro de los objetivos de largo aliento de este gobierno: pobreza alimentaria cero para Jalisco.
Pero no hemos llegado hasta aquí solos. Si hemos conseguido todo esto es gracias al invaluable acompañamiento de la sociedad civil organizada, que nos aprieta y exige cuando nosotros bajamos el ritmo, pero que también reconoce que hemos avanzado muchísimo camino durante este sexenio. Y ha sido gracias también a la indudable voluntad política del gobernador Enrique Alfaro por atender esta causa tan apremiante con todas las herramientas que están a nuestro alcance.
No es mi estilo confrontar, pero no quisiera dejar de condenar las lamentables declaraciones de Ana García Vilchis, quien acusó sin evidencias a Nariz Roja A.C. de ser una organización “golpista” que busca desestabilizar al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien, por cierto, respetamos y reconocemos en su posición de jefe de Estado de todos los mexicanos. Sin embargo, estas declaraciones lastiman a la verdad y desacreditan el trabajo incansable de una organización seria, profesional y dedicada a cubrir las carencias de nuestro sistema de salud en la atención de personas con cáncer. Desde aquí, todo mi reconocimiento y un fuerte abrazo a Nariz Roja a quienes, por cierto, les entregamos en comodato un vehículo para el traslado de niñas y niños que requieren de quimioterapia.
Tanto las metas de cobertura 100% en atención al cáncer infantil como de hambre cero en Jalisco serían imposibles sin la colaboración entre los distintos sectores de la sociedad civil (iglesias, bancos de alimentos, universidades, ONGs) y el gobierno del estado. La puerta de mi despacho siempre estará abierta para todas aquellas personas que, estén o no en la política, busquen aportar su energía a lograr los objetivos más nobles a los que podríamos aspirar como jaliscienses.
Sigamos trabajando juntos por un Jalisco y un México mejor
TW: @AlbertoEsquerG
