El comisario de seguridad de Tizapán el Alto, Marco Antonio Rodríguez Torres, fue asesinado por una oficial de la misma corporación que se desempeñaba como su escolta, y que además era su pareja sentimental.
La Fiscalía del Estado informó que ya obtuvieron una orden de aprehensión en contra de la implicada y se han desplegado operativos para su búsqueda y captura.
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“Al tener conocimiento de la noticia criminal, el agente del Ministerio Público generó el mando y conducción para dar inicio con los actos de investigación que permitieron establecer la posible responsabilidad de una mujer, quien era su pareja sentimental y escolta, en esta agresión; Policías de Investigación continúan con su búsqueda”.
La mañana del lunes, el comisario fue localizado sin vida a bordo de su patrulla, una camioneta pickup en color blanco con códigos luminosos.
Cerca de las 9:15 horas los policías municipales acudieron al cruce de las calles Aquiles Serdán y 10 de Mayo, en la colonia Flores Dávalos, para verificar un reporte en el que les mencionaban que dicho vehículo estaba estorbando en una cochera y que en su interior había un policía herido.
Al llegar al lugar, los uniformados se dieron cuenta que se trataba de su jefe, el Comisario de Seguridad Pública, por lo que de inmediato solicitaron la presencia de una ambulancia.
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Cuando llegaron los paramédicos nada pudieron hacer y solo confirmaron el deceso del mando policial el cual presentaba un impacto de arma de fuego en tórax superior derecho.
Peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses se encargaron de realizar la recolección y fijación de los indicios, mismos que serán integrados a la carpeta de investigación, en tanto que el cuerpo fue trasladado a la morgue donde se llevará a cabo la práctica de la necropsia, entre otros dictámenes.
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